domingo, 1 de marzo de 2009

Tengo un jardín (No one else)

Yo tengo un jardín. Debe ser de los mejores descubrimientos que he hecho en años.

La entrada puede parecer decadente y mustia pero los robles se alzan con fuerza para marcar la cuesta de arena que se adentra hacia el espesor de los mil matices de verde que crecen con la humedad de los días.

Si uno sabe girar con certeza desemboca al pequeño patio con fuente y hiedras que juegan al corro con el quiosco de música que centraliza toda la atención. No hay música. No hay instrumentos. Ni siquiera hay público con la excepción de dos estatuas que pretenden imitar a un par de dioses griegos. Por sus elementos una diríase Afrodita, el otro, Apolo. Pero no hablan y ven pasar la lenta cadencia de acordes con una impasividad propia de las divinidades. Que para eso son eternas.

Un poco más arriba, el camino marcado por cipreses. Dicen que los cipreses son los árboles de los muertos pero a mi me gusta su compañía. Ladeados, parecen mecerse en busca de un saludo.

Y al fin, el lago. Verde, tardío y lleno de promesas. La torre de agua controlándolo no vaya a ser que pierda el cauce. Todo rodeado de arbustos y maleza, una pequeña gran gruta ajena al tráfico de las horas.

Paseando, me pregunto si deben existir más personas que tengan un jardín por donde dejar las huellas una mañana de domingo y neblina. Si, por más que uno esté ocupado, sabrán adentrarse entre la espesa maraña de hojas color botella para compartir la sensación de que no todo está perdido y si , en esa unión solitaria con otros propietarios de jardines, conseguirá saborear la pequeña corriente de frío que repta por la nuca y nos hace sentir vivos.

Si me apoyo en el pequeño puente veo manos que se espesan y tímidas, roban una carícia. Labios que penden de los árboles y sólo quieren madurar para caer y ser libres. Benditos aquellos que los recojan porque no hay mejor fruta que la que quiere ser mordida.

Porque mi jardín está vacío pero sé que estoy acompañado. Aunque sea de almas lejanas y desconocidas.

Bienvenidos a mi jardín romántico. Llenémoslo de música.
http://www.youtube.com/watch?v=AwzvuiMk-m8

2 comentarios:

ADRIANO dijo...

Qué bonito tu jardín, me encantaría pasearme por él. Teniendo la sensibilidad que tienes para escribir de esa forma, no me cabe la menor duda de que tu jardín se irá llenando, sin obviar lo atractivo del propietario (aún recuerdo la anterior foto de tu perfil).
Besos

AnadelasTejasrojas dijo...

¿Dónde está?
¿Esta en Barcelona...?
¿Dónde...?
.....................
¡A Dios pongo por testigo... que lo encontraré¡