sábado, 7 de junio de 2008

De la libertad

De la libertad
recuerdo

el sonido de las cadenas
como tintineo
de demandas susurradas.

Atar las sombras

por los pies
tropezar.

Tras la cara torcida
el vacío

y de nuevo
pasear con el tin-tin-tin.

Porque te oigo
me ofende la afonía

y tus manos libres
ansían -a traición-
bolsillos.

Libre, dices.

A mandíbula batiente.

3 comentarios:

Emilio Ruiz Mateo dijo...

¿Libertad? La libertad debería estar prohibida. Si suena a cadenas.

Sunion30 dijo...

jaja, no era la realidad Leo?? Claro que se puede extender a tantas cosas...
Todo lo que suene a cadenas de fondo me echa para atrás, ya lo sabe usted Mr.Week.

Música dijo...

la LIBERTAD verdadera...la de pensamiento, si lo pensamos bien, buscamos no estar libres de casi nada