sábado, 3 de mayo de 2008

...es urgente que escuches...

MENTALISMO: Teoría filosófica que no tiene en cuenta las experiencias objetivas
y trata de resolver los problemas exclusivamente mediante procesos
naturales.


Sucede a veces que las noches son como cobertizos donde la luna y las chicharras lanzan los mismos suspiros a ambos lados de la Tierra. Una persona se mece con el crujir de las maderas que rodean sus recuerdos. Pero algo incombustible subyace con forma de estatua interrogante: esos recuerdos no los ha vivido. Ni en primera ni tercera persona. Acaso en segunda.

Mentalismo, procesos naturales, paliza a la razón. Pedazos de conexiones entre la physis y el sujeto. Edredón de momentos robados con los que taparse por la noche.

¿De dónde vendrán todas aquellas sensaciones compartidas? ¿Hacia dónde esos rostros no objetivos que por momentos paran el tiempo y el espacio del día a día?

Y podrías llegar a la oficina un lunes por la mañana, dejar la chaqueta y la bolsa,
ir a la máquina de café. Sentarte y desenvolver el bocadillo, darle pequeños bocados. Entonces la pregunta fosilizada “¿qué hiciste el fin de semana?” no parecerá tan repetitiva como en otras ocasiones; sin salir de casa estuviste paseando cerca de la playa, se te quedó arena entre los dedos (qué rabia), corriste hasta caer rendido y salpicado de agua. Comiste pescaíto frito, jugaste a las palas.
Seguiste a su figura por la orilla, os mojásteis los pies de ensoñaciones y conchas.
El tacto, el tenso e invisible lazo que une los pensamientos que sólo os atrevísteis a callar.
Compartísteis el atardecer cubiertos con una toalla. Refrescaba. La vuelta a casa con la sal como segunda piel.

Nunca estuviste allí pero en esas fisuras que quedan entre la razón y la naturaleza tú supiste colarte. Si quieres buscar explicación mejor toma asiento. Carga el café que es lunes, día racional por antonomasia.

Tira de filosofía cuanto quieras. Quizás llegues a buen puerto. Pero cuando regreses de noche a casa y recojas el desorden, intenta explicarte a ti mismo por qué al poner boca abajo el pie derecho de tus bambas una pequeña cascada de arena se precipita hacia el suelo.

8 comentarios:

Rocío dijo...

¡Qué cosa más bonita!
Así es la mente: nos hace sentir, paladear y tocar lo visto por otros ojos que no son los nuestros.
Siempre disfruto leyéndote.

Sirena Varada dijo...

Con recuerdos no vividos, o acaso en segunda persona ¿Seríamos capaces de recordar de dónde salió esa pequeña cascada de arena del zapato? ...Me temo que no. No sin la magia.

Hermosa y precisa descripción del mentalismo.

Sunion30 dijo...

Rocío: deberían enseñarnos desde pequeños a potenciar los cinco sentidos con nuestra mente. Todo sería más auténtico.
Me gusta que te guste, αγγαλια!

Sirena: ahí está la clave. La magia. Y no hay explicación que la ate. Y que sea así por mucho tiempo.
Gracias por tu visita.

Música dijo...

me he acordado de Candela Peña en la película Princesas cuando decía que sentía nostalgia de cosas que nunca habían sucedido...

Emilio Ruiz Mateo dijo...

Haber estado allí... me da lo mismo. Lo que no me da lo mismo es esa arena en la bambas. Me ha hecho sonreír. Tú lo llamarás literatura...

Julio Castelló dijo...

Y qué de la posibilidad de no haber estado en ninguna parte, o al menos no donde estuviste y dolió... Perdón, es que he tenido un puente para tirarse por él. Con arena en la playa y todo.
El texto, como viene siendo habitual, es estupendo.

Sunion30 dijo...

Música, es cierto!! habia olvidado ese momento Candela. Cuánta razón tenía.Quien no ha sentido así?

Mr.Week, yo ya no sé ni que nombre darle a este tipo de cosas, literatura, magia,...limitaciones del lenguaje supongo.

Julio..si el puente ha sido para tirarse mejor asegúrate de saltar con una buena cuerda elástica porque debes volver entre nosotros.
Una solución a tu pregunta sería tirar de la memoria selectiva. ¿Borrar esa arena? Si podemos crear recuerdos de la nada también deberíamos poder difuminarlos...
Un abrazo!

Emilio Ruiz Mateo dijo...

Pues nada, lo llamamos mentalismo, y todos contentos...